Hola holita a todos!!!
Pues sí Tere, en septiembre embarcaremos de nuevo en el Brilliance. Conocemos el barco sobradamente, esta será la sexta vez que naveguemos en él, pero no nos irán mal tus impresiones pues creo que lo han reformado recientemente y nos irán de perlas tus comentarios.
Venga!!! Seguimos con el relato. La siguiente escala era Marsella, con un día de navegación entre medio, pero por el mal tiempo suspendieron Marsella y la cambiaron por Cartagena. A nosotros el cambio no nos importó en absoluto, pues, además de recordar (malos recuerdos, la verdad) viejos tiempos (hice la mili allí en Infantería de Marina) tuvimos la oportunidad de estar un rato con Isa y Ramón..... el famoso Cucreco jajajajajaja. Vinieron desde Murcia, estuvimos tomando unas cervezas y comentando un montón de cosas, al mediodía nos despedimos pues debían volver a Murcia antes de comer. Pero no acabó ahí la cosa pues contactamos con una parejita de recién casados de Murcia que conocimos en noviembre en el Infinity y sin pensarlo dos veces vinieron a comer con nosotros. En definitiva un día genial y una escala muy bien aprovechada.
Al día siguiente tocaba navegación, luego os cuento.
A mi tampoco me habría importado nada que me cambiasen Marsella por Cartagena 😀
Además, para los que viajamos con "ferrari", el puerto de Marsella es bastante complicado, al no haber casi nunca taxis adaptados, por lo q ue la última vez, a bordo del Costa Favolosa, optamos por quedarnos en el barco.
Si a eso le sumas un encuentro con Isa y Ramón, y una comida con otros amigos, pues mejor que mejor
Gracias por compartir, Edu!
Buenas!!!!!
Seguimos, después de Cartagena tocaba día de navegación. Esos días, bajo mi punto de vista, son agotadores pues te levantas y vas a desayunar, después, te tumbas en el solarium a leer o escuchar música, al rato, vuélvete a levantar a buscar algún refrigerio, te vuelves a tumbar, cuando se va acercando la hora de comer toca el correspondiente mojito, cervecita, vinito, etc., luego a comer, así que has de desplazarte hasta el comedor o bufet. Después de comer, vuelve a la tumbona a dormitar mientras se te cae la baba, a media tarde, con la boca reseca apetece tomar algo y, claro, hay que ir al bar del solarium y volver cargado con dos piñas coladas o algo por el estilo. Más tarde hay que ponerse algo más decente que los pantalones cortos y las chancletas para cenar por lo que vete al camarote para "adecentarte", antes de cenar algún aperitivo ¿no?, luego hora de cenar y después escuchar música en directo en alguno de los salones con un par de gin-tónics......... o tres.
Nada, lo que yo digo, días de navegación equivalen a un estrés total.
Por cierto, ese día el mar estuvo muy cabreado y sobre todo a la hora de cenar fue una auténtica aventura llegar hasta el comedor y desplazarse por el barco.
Al día siguiente llegábamos a Villefranche, pero os lo cuento en otro momento.
Hola !
Jajajaja!!! Bendito estrés , o cuatro...... 🤣 🤣 🤣 🤣 🤣 A mi me encanta estresarme de esa manera, como me gusta leer, me llevo libros tipo tocho, y ya sea en el solarium, en el camarote a la hora de la siesta o antes de dormir, me leo unos cuantos capítulos. Eso de la piña colada, me suena, y ahora no recuerdo el barco, pero recuerdo un cafe con cacao y un pastelito de media tarde que estaba de muerte, ah!!! y en otro el aperitivo con gambitas y una cervecita o refresco.
Quiero estresarme aunque sea un poquito..... 😫
¡¡¡Me encanta ese stress!!! 🤣 🤣 🤣
Deseando que nos cuentes la escala en Villefranche, es un pueblo que me encanta 😍
Además fue la primera escala de nuestro primer crucero, a bordo del Voyager of the Seas que zarpaba de Barcelona.
Novatas, novatas, eramos mi madre y yo en aquel crucero, que fue el que nos enganchó para siempre en esto de crucerear.
Seguimos por aquí 😉
Hola!!!! Ya estoy aquí otra vez.
Llegamos a Villefranche. El mar se fue calmando poco a poco y pasamos una noche bastante placentera.
Como todos sabéis en esta escala se llega a tierra firme en tenders. He de decir que la ayuda y asistencia para ir a tierra y volver al barco fue excepcional. Una persona se cuidó de llevar al tender la silla de ruedas y dos más ayudaron a Montse, a la vuelta lo mismo.
Una vez en el pueblo nos dedicamos a pasear hasta la otra punta, donde están las escaleras que llevan a la estación de tren, y en un chiringuito de la playa nos sentamos a tomar unas cervezas.
No quisimos movernos a los pueblos cercanos pues ya los conocíamos y además estábamos a una semana del gran premio de fórmula uno y en otra ocasión ya nos pasó que, al tratarse de un circuito urbano, Mónaco estaba totalmente colapsado con los preparativos.
Después de un buen rato en aquella terraza con las vistas de la playa, la bahía y el Infinity al fondo, volvimos dando un tranquilo paseo hasta la zona de los tender y de nuevo al barco.
Y nada más que contar de esta escala, la siguiente la archiconocida Livorno.
Hola a todos!!!!
Comenzamos semana y seguimos con Livorno.
Poca cosa que contar, desayuno en el Tuscan Grillé, que es el restaurante que habilitan para los desayunos de miembros élite y salida del barco sin colas ni esperas.
Allí como, todos sabéis, hay un servicio de autobuses de traslado al centro de la ciudad y la verdad es que funcionó bastante bien y con alta frecuencia de salidas y llegadas.
Una vez en Livorno centro estuvimos paseando por las callejuelas, el mercado y dimos con un restaurante-pizzería que tenía muy buena pinta. Comimos unas pizzas, que estaban riquísimas y luego, dando otro agradable paseo nos dirigimos hacia la plaza donde tenía la parada el autobús lanzadera.
Una vez en el barco, cervecitas, descanso y a prepararse para la cena.
El viaje iba llegando a su fin, al día siguiente la última escala, Civitavecchia.
Un viaje de autentico relax, y por ahora el tiempo os acompaña
SALU2
Hola de nuevo, buenos días!!!!
Pues sí Avieta, hasta Civitavecchia nos hizo un tiempo fantástico y respecto al relax, bueno, nuestros viajes y cruceros nos los tomamos así, dadas las circunstancias.
Venga, ya estamos en Civitavecchia y allí llegó la lluvia. Habíamos dejado para ese último día algunas compras para nuestra hija y los abuelos en tiendas que ya teníamos controladas de otras ocasiones, de no ser así no hubiéramos bajado del barco pues nos mojamos.....hasta la ropa interior. De hecho Montse pilló un resfriado que todavía le dura.
Como siempre desayunamos tranquilamente y salimos del barco alrededor de las 10:30 de la mañana, entonces sólo caía una ligera llovizna. Subimos al shutle que nos llevó hasta el parking de autocares y de allí comenzamos a "patear", en ese momento ya empezaba a ser más intensa la lluvia y, aunque íbamos bastante bien equipados, nos pusimos como un "Cristo" de agua. Hicimos las compras y decidimos volver al barco. A medio camino nos refugiamos bajo el porche de una tienda de instrumentos musicales y, qué casualidad, vi algo que hacía tiempo que quería comprar, pero me retenía el precio, se trata de un plato para la batería, un Paiste 2002 Ride 18", un plato que ya no se fabrica y uno de los mejores que hay....... podríamos decir que es un plato "vintage" y estaba a un precio increíble. Evidentemente lo compré.
Proseguimos nuestro camino hasta el shutle y de vuelta a "casa". Una vez en el barco nos cambiamos de ropa y fuimos a comer.
Debo decir que ese día había en Civitavecchia 8 o 10 cruceros, no os exagero, y, claro todos tenían sus lanzaderas en el famoso parking de autocares a la salida del puerto, con el agravante de que había embarque y desembarque en algunos de los barcos, es decir que entre personal y maletas tenían un buen "sidral" montado.
Y así fué nuestro crucerito, quedaba un día de navegación hasta Barcelona.
Todo pasa por algo, si no hubiera llovido no tendrías el plato. la pena es el resfriado de montse
SALU2
Todo pasa por algo, si no hubiera llovido no tendrías el plato. la pena es el resfriado de montse
Así es, como dice el refrán "No hay mal que por bien no venga".
Buens tardes,
Muy ameno el relato, Edu, lástima que al regreso puede que nos traigamos algo no deseado, como el resfriado de Montse, pero lo del plato....estoy de acuerdo con el refrán.
La última vez que estuvimos en Civitavecchia también nos dedicamos a patear un poco la ciudad y nos llegamos hasta su mercado y mercadillos de las calles adyacentes, que resultó muy interesante y curioso de ver, además de entretenido.
Que tengais un feliz dia.
Muy ameno y agradable el relato, espero que Motse se recupere lo más pronto posible y a pensar en el próximo.
Un fuerte abrazo para los dos.
Hola a todos!!!!
Muchas gracias por vuestros comentarios.
Tere, tienes toda la razón, el mercado y mercadillo de Civitavecchia es curioso y entretenido.
Fermín, poco a poco Montse se va recuperando y ya casi está al 100%..... bueno dentro de sus posibilidades.
Último día de crucero, navegación hacia Barcelona. No hace falta que os vuelva a contar el tremendo ajetreo de esos días que se suponen de relajación jajajajajaja es un no parar de tumbarse y levantarse, agravado por el tener que hacer las maletas.
En fin, ya en Barcelona, habíamos elegido la salida a las 9 de la mañana. Nosotros teníamos habilitado el mismo restaurante de los desayunos como salón de espera para desembarcar, con café, leche, zumos, infusiones y pastas para poder desayunar algo ligero sin el follón de tener que subir al bufet. Llegada la hora salimos, encontré las maletas rápidamente y con nuestro taxista de confianza nos fuimos a casita con mucha pena, pues nos lo habíamos pasado muy bien en este crucero.
Colorín colorado........ en septiembre volvemos a estar embarcados.
Pues colorin colorado, hasta septiembre 😘 que está a la vuelta de la esquina 😉
Me encanta vuestra forma de crucerear, es muy parecida a la que hacemos mi madre y yo, tranquilas, relajadas, disfrutando del barco y de la gastronomía, y dando un pequeño paseo en las escalas para conocer o re-visitar una vez más lugares ya vistos.
¡Genial!
Espero que Montse esté mejor de ese catarro y espero algún día poder ver en vivo y en directo como funciona ese plato que te trajo la lluvia 🤣
Besosssssssssssssssssssssssssss 😍 😍
